La compañía facturó 1.528 millones de dólares en el tercer trimestre de su ejercicio (equivalente al primer trimestre natural). La empresa registró unas pérdidas de 61,7 millones.
Coty obtiene un respiro en medio de la tormenta. La empresa ha llegado a un acuerdo estratégico con el fondo KKR para venderle su negocio profesional (que incluye Wella, Clairol, OPI y GHD). Además, el fondo se ha comprometido a comprar 750 millones de dólares en acciones de Coty.
El pacto supone un balón de oxígeno tras un trimestre en el que, como todos los grandes grupos del sector, Coty ha sufrido el impacto del coronavirus. La compañía estadounidense ha cerrado los tres primeros meses del año con unas ventas de 1.528 millones de dólares, un 23,2% menos que en el mismo periodo del año anterior.
Entre enero y marzo (equivalente al tercer trimestre del ejercicio fiscal de Coty), las ventas comprables se redujeron un 19,5%, lastradas por el descenso del 34,8% registrado en Asia Pacífico y del 20,1% en Europa, Oriente Medio y África.
Coty ha anunciado un plan para reducir costes fijos en 700 millones de dólares
En América, la última región a la que llegó la pandemia, el descenso fue del 18,8%. Sólo en marzo, la empresa anotó una caída del 30%. En los nueve primeros meses del ejercicio, la facturación de Coty se ha reducido un 11%, hasta 5.816 millones de dólares.
Por su parte, el margen bruto del grupo se ha reducido en 320 puntos básicos en el primer trimestre, hasta situarse en el 59,6%, y las pérdidas ajustadas ascendieron a 61,7 millones de dólares, frente al beneficio de 101,6 millones del mismo trimestre de 2019.
Coty llevaba desde finales del año pasado buscando un comprador para su línea de negocio profesional. Finalmente, KKR se ha comprometido a hacerse con el 60% de la filial en una operación valorada en 4.300 millones de dólares, 12,3 veces ebitda. El acuerdo no incluye el negocio de Brasil.
Además, KKR ha acordado comprar acciones de Coty por valor de 750 millones de dólares. En paralelo, el grupo ha anunciado un plan para reducir costes fijos en 700 millones de dólares, siempre que la operación con KKR se complete con éxito.