La negociación del Plan de Igualdad de BSM sigue incumpliendo el tutelaje de la Inspección de Trabajo

Información sobre la auditoria retributiva 2022 de BSM, Zoo y Tibidabo

Una vez recibida y analizada la auditoria retributiva, CCOO manifiesta su disconformidad y emite INFORME CONTRADICTORIO.

La Auditoria incumple la normativa pues no desagrega por categorías ni lugares de trabajo, no especifica de manera diferenciada cada percepción económica, no respeta el principio de transparencia respecto a la Valoración de Puestos de Trabajo, ni con respecto a la clasificación profesional de cada convenio colectivo aplicable, obviando las diferencias existentes entre el convenio colectivo del ZOO y el de BSM.

Se hace referencia a complementos salariales y horas complementarias sin que podamos disponer de los datos de origen. Se hace constante referencia al equilibrio legal 60-40, y a su proximidad, evitando constatar la necesidad de establecer medidas para avanzar en igualdad de oportunidades.

En el grupo 7 donde se encuentran más cantidad de personas trabajadoras, entre 2021 y 2023 se ha pasado de un 16% más de hombres que mujeres, a un 24% más. Eso nos permite afirmar que vamos en una tendencia negativa, involucionando en igualdad de oportunidades, precisamente en aquellas categorías que ocupan mayor número de personal. Y sin embargo, no se menciona en la presente auditoria, ni se proponen medidas.

Sobre el TECHO DE CRISTAL, y la promoción de las mujeres, hemos de tener en cuenta que por tratarse principalmente de personas fuera de convenio, no existe ningún control sobre la posibilidad de promociones internas, lo que seguramente impide que mujeres con formación suficiente pudieran optar a estos puestos, y en caso de no disponer de la formación, tampoco se les hubiera ofrecido. Optando así, (la empresa), por acudir a selecciones externas, desaprovechando el talento existente en la compañía. Sin embargo, nos quieren vender como un gran logro que hay unas pocas mujeres con sueldos astronómicos en la cúspide de la pirámide, y aunque hay que valorarlo, eso no puede esconder la realidad.

Falta analizar en qué categorías o grupos profesionales y puestos de igual valor se producen diferencias salariales. Y en qué conceptos salariales también se producen (por ejemplo: horas extras, reducciones y adaptaciones de jornada, turnos de conciliación o turnos de fines de semana y festivos). Así como tipos de contrato (eventuales, fijos discontinuos, indefinidos a tiempo parcial). Y determinar las causas de estas diferencias y si esas causas están justificadas o se deben a posibles discriminaciones salariales.

Tampoco se analiza si se permite el ejercicio corresponsable de los derechos de la vida personal, familiar y laboral (si mujeres y hombres utilizan en igual medida las excedencias o las reducciones de jornada para cuidado de menor o familiar o si el tiempo en el que una persona trabajadora está en suspensión del contrato de trabajo por nacimiento, adopción o acogimiento o cuidado de menor o disfruta de una excedencia por cuidado de menores o familiares, afecta a su salario base, sus complementos salariales y extrasalariales y si está justificada la reducción o eliminación de algunos de los conceptos retributivos (pluses de disponibilidad, antigüedad, mayor dedicación, etc).

La auditoria tampoco incluye un estudio en materia de promoción dentro de la empresa. No incluye un análisis de las promociones y ascensos en el año 2022, ni el número de personas que han optado por ellas, las que han sido descartadas y los motivos; y las que finalmente han promocionado.

Tampoco incluye un estudio sobre la formación impartida a la plantilla y si influye por igual a todos los niveles profesionales o se invierten más recursos en ciertas categorías. Si las trabajadoras y trabajadores participan en igualdad de condiciones; si las personas que disfrutaban de alguna medida de conciliación o reducción de jornada han tenido la misma oportunidad de acceso a la formación; o si se establece un acceso prioritario a las trabajadoras para participar en acciones formativas que fomenten su inserción en áreas de trabajo masculinizadas, etc.

CCOO hemos insistido desde el principio porque creemos que es básico para poder avanzar en materia de igualdad dentro de nuestra empresa. La infrarrepresentación femenina en determinadas unidades. Seguimos viendo que se maquilla o se esconde en lugar de focalizar sobre ella para tratar de mejorarla.

Mientras la Dirección de BSM pretenda escurrir el bulto, como si todo fuese perfecto y maravilloso, mientras continúe su política de parches y maquillaje, ignorando la participación y consulta con la representación sindical NO PODREMOS AVANZAR.

Desde CCOO no podemos dar por buena esta auditoría y por tanto su diagnóstico, a menos que corrija todos aquellos aspectos y afirmaciones que vierte, que según nuestro criterio no se ajustan a la realidad y, por el contrario, se obstinan en INVISIBILIZAR realidades que no son solo producto de una política empresarial, sino también de una construcción social que nos limita.

Es por ello, que desde CCOO nos ofrecemos a un debate constructivo en el seno de la Comisión, focalizando las situaciones más problemáticas (con sesiones monográficas de ser necesario) y tratándolas desde una perspectiva global, funcional y ambiental. Pues creemos que en ocasiones no se trata solo de la voluntad de la selección de personal, sino también de crear las condiciones y el entorno más favorable para que esas nuevas contrataciones permanezcan.